jueves, 25 de agosto de 2011

Mi primer Amor.


no pensé que al desempolvar aquella caja vieja, y encontrarme
con los recuerdos de la infancia recordaría como si fuera ayer
cuando la vi, y decidí llevarla conmigo siempre…
cuando hablamos por ves primera, sentí aquella pasión por visitarlo
cuando me hacia falta.
En mi cabeza se cruzaban letritas de lado a lado, sintiendo el sabor
casi húmedo de sus palabras, admito que había olvidado que una
parte mía estaba encerrado en aquella caja, al abrir encontré fotos de amigos,
cuadernos con apuntes que tristemente esperaban por mi, y mas al fondo
mi primer libro.
Aquel librito pequeño amarillento, de esquinitas dobladas que cálidamente
posa sobre mis manos, me pregunto hace cuanto aprendí a leer, y hace cuanto aprendí amar.
Este pequeño libro fue mi inspiración, mi leal compañera con la que pasaba mucho tiempo
no hablándole yo, hablábamos juntos, reíamos juntos, lloramos juntos.
Pregunto cuantos recordaran el primer libro, revista, recorte, diario, etc.
que haya cautivado sus vidas, porque para mi fue como el primer amor,
no necesitaba pedirle un tiempo para estar juntos, siempre esta ahí esperando por ti
para empezar una nueva aventura, y seguir siendo el mejor confidente.
Quizá surge la pregunta de lo que ahora eres, quizá ayudo a moldear tu vida
a formar tu ideología, o simplemente a imaginar, que existe un mundo diferente
a lo real.
Hoy volví a leer una y otra ves y me sentí como aquel niño que abrazaba su
propia vida, y me devolvía aquella inocencia cuando creía
que el bien siempre gana sobre el mal, y cuando abres los ojos te chocas con una realidad diferente.
La vida esta echa de letritas, aprendamos a leernos, a comunicarnos mejor.
El mejor poema, la mejor canción, el mejor discurso.
Esta echo de palabras.
Presiento que esta noche es la mas larga de todas aquellas que me paso
sentado frente a este ordenador, casi tengo las manos heladas
y mi taza de café turbio y oscuro.
Pero…
Volver a recordar es una buena manera de volver a vivir
a sentir las caricias de aquellas palabras, que son como música
armoniosa que se pierden en el corazón.


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